El placer del CHOCOLATE

A pesar de que siempre se ha tenido al chocolate como al enemigo número uno de una silueta delgada y saludable, no es tan malo como lo pintan.
Es cierto que sus principales componentes son las grasas y el azúcar, pero también tiene flavonoides,como la epicatequina, que tiene un efecto cardioprotector. Además contiene fibra y sustancias, como la cafeína y la teobromina (ejerce una acción tónica sobre el organismo, activa la diuresis y estimula la circulación sanguínea), que lo hacen estimulante, feniletilenamina y anandamida, que provocan un efecto placentero y de relajación... Tienen ácido fólico, calcio (el con leche), proporcionan energía, y la acción sobre el placer hace que se refuerce el sistema inmune, qué más le podemos pedir?

Estas sustancias también se obtienen de otros alimentos, como cebollas, manzanas, judías, pero siempre es recomendable una dieta variable, en especial cuando el sabor es tan agradable como el del chocolate. Eso sí, hay que tomar chocolate puro, negro; se ha demostrado que la leche o el pan, tomados a la vez que éste, anulan su acción y que lo mejor es tomarlo en dosis moderadas, pero solo.

Otra anotación importante es a la hora de guardar el chocolate. Nunca se debe meter en la nevera. Es un alimento muy estable debido a la poca agua que tiene, y si lo introducimos en la nevera, anularemos la barrera de protección que tiene. Además, el chocolate es una sustancia con mucha grasa, y las grasas absorben los aromas de su alrededor, con lo que bastaría dejar un poco de pescado en la nevera para que el próximo trocito de chocolate supiera a infierno.

Ya sabéis, a quitarle la etiqueta de malo al chocolate y guardarlo lejos de ambientes húmedos. Y sí, es afrodisiaco, pero solo el negro.